2.png

Semana 1 - Concéntrate en Dios | Día 2 - ¿Cuánto cuesta esto?

ESCRITURA - 1 Crónicas 21:18-19, 22-24 (NTV)
Entonces el ángel del Señor le dijo a Gad que diera instrucciones a David para que subiera y edificara un altar al Señor en el campo de trillar de Arauna, el jebuseo. Así que David subió para hacer lo que el Señor le había ordenado por medio de Gad. David le dijo a Arauna: —Permíteme comprarte este campo de trillar por el precio total. Así podré edificar allí un altar al Señor, para que detenga la plaga. Tómelo, mi señor el rey, y úselo como usted quiera—le respondió Arauna a David—. Yo le daré los bueyes para las ofrendas quemadas y los tablones de trillar como leña para hacer un fuego sobre el altar, y también le daré el trigo para la ofrenda de cereales. Se lo daré todo. Pero el rey David le respondió a Arauna: No, insisto en comprarlo por el precio total. No tomaré lo que es tuyo para dárselo al Señor. ¡No presentaré ofrendas quemadas que no me hayan costado nada!


OBSERVACIÓN
Después de que el rey David desobedece a Dios, una plaga causa estragos en Israel, y Dios llama a David para que le construya un altar como señal de arrepentimiento. David quiere hacer lo bueno ante los ojos de Dios y obedece. ¡Luego tiene la oportunidad de obtener la tierra, los materiales de construcción y las ofrendas para el sacrificio de forma gratuita de uno de sus súbditos! Parece un buen negocio, ¿verdad? Pero David rechaza la oferta, sabiendo que la adoración verdadera y el arrepentimiento ante Dios deben costarle algo a alguien para que valga la pena.


APLICACIÓN
Cuanto más invertimos en algo (tiempo, energía, recursos), más estamos invertidos. A veces, solo vamos al gimnasio porque pagamos la membresía. Puede que te quedes despierto durante horas montando una estantería de diseño suizo porque, aunque ya te ha llevado tres horas, no dejarás que te derrote antes de irte a la cama. Estás más involucrado en una relación que tiene historia, sacrificio y dificultades que en cualquier conocido.

La adoración a Dios que te cuesta algo puede parecer un poco intenso, pero en realidad es algo muy bueno porque significa que lo valoras y estás dispuesto a dar de ti mismo para demostrarlo. Este ayuno le costará a muchas personas su comodidad o satisfacción. Pero más allá de este ayuno, ¿qué te cuesta tu relación con Dios? ¿Le estás dando tiempo? ¿Energía? ¿Dinero? En lo que nosotros invertimos, se invertira en nosotros.


ORACIÓN
Pregúntale a Dios hoy: "¿Qué puedo darte para demostrar que estoy involucrado en mi relación contigo?" Recuerda que no se trata de trabajar para demostrar que eres digno de Su amor; es fruto para mostrar que estás viviendo en Su amor.

"Dios, ayúdame a ver lo que puedo darte. Ayúdame mientras te doy mi dieta durante este ayuno. Dame la fuerza y ​​la convicción para honrarte con mi vida, y ayúdame a ver eso a medida que invierto más en mi relación contigo, sólo se enriquecerá. En el nombre de Jesús, amén".